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Luego de que cientos de actores manifestaran su angustia por no poder trabajar este verano en la Costa Atlántica, se conoció que finalmente habrá temporada teatral. Este jueves por la mañana hubo una reunión entre productores del sector, el ministro de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica bonaerense, Augusto Costa, y el viceministro de Salud de la Provincia, Nicolás Kreplak. Todos llegaron a un acuerdo para que que desarrollen los diferentes espectáculos, aunque siempre cumpliendo con un estricto protocolo.

 

Además, se convino que las condiciones para la organización de espectáculos se revisarán periódicamente según las condiciones epidemiológicas de cada centro turístico provincial, y que se facilitarán espacios privados y públicos adecuados para que también puedan desarrollar sus producciones las salas independientes que no estén en condiciones de funcionar.

 

Lino Patalano, uno de los representantes del sector teatral que estuvo en la reunión, exclamó en un ciclo radial de AM 1270 que tanto él como Carlos Rottemberg cederán sus salas para aquellos teatros independientes que no puedan adaptarse al protocolo. Aunque reconoció: “No creo que sea rentable, pero lo importante es poder mantener la actividad. Para mí el encuentro fue espectacular”.

 

“Yo creo que lo que surgió en pandemia va a dar un cambio a favor, en la medida que lo podamos capitalizar, como transmitir un estreno por streaming. Acercar el teatro a quien no puede venir a verlo o donde no hay actividad teatral. Yo me voy a jugar a ver si podemos abrir alguna sala en noviembre, en Mar del Plata, aunque sea como conejito de Indias, para ver si todo funciona como corresponde”, concluyó el empresario con mucha esperanza e ilusión de que todo salga bien.

 

Durante la última semana, fueron varios los actores que se manifestaron en las redes sociales para que se reabrieran las salas durante el verano. “Malísimo, gente acumulada en los shoppings pero con protocolo y distancia social los teatros no abren”, exclamó José María Muscari. Por su parte, Federico Bal agregó: “Me duele tanto. No pasa por el dinero que todos necesitamos, sino por la cantidad de colegas que esperan la temporada con tanta ilusión”. Omar Suárez tampoco se quedó callado: “¿Cómo puede ser? ¿Un restaurante sí y un teatro no? ¿Nadie va a hacer nada?”.