Diez cortes de carne vacuna se venderán al público con rebajas de hasta un 30% respecto de los precios de diciembre, en 1000 puntos de ventas en todo el país y en uno de cada tres días de cada mes.
Según el acuerdo alcanzado hasta el momento, y que el Gobierno espera oficializar en las próximas horas, se ofrecerían como volumen inicial entre 5.500 y 6.000 toneladas al mes, que saldría a la venta, los fines de semana y los 3 primeros miércoles de cada mes.
La tira de asado, también denominada costilla, y la falda, un corte similar también con hueso, serían los productos que más bajarían; un 29 y 30% respectivamente.
Precios
Tira de asado: $399 (29% más bajo que en diciembre)
Vacío: $499 (20% más bajo que en diciembre)
Matambre: $549 (13% más bajo que en diciembre)
Tapa de asado: $429 (15% más bajo que en diciembre)
Cuadrada/bola de lomo: $489 (13% más bajo que en diciembre)
Carnaza: $359 (13% más bajo que en diciembre)
Falda: $229 (30% más bajo que en diciembre)
Roastbeef: $399 (12% más bajo que en diciembre) -
A esos 8 cortes, se suman los 2 (Carne Picada y Espinazo) que ya están presentes en el programa Precios Cuidados.
El plan se instrumentará a partir de un acuerdo alcanzado por el Gobierno con cámaras del sector privado de la cadena cárnica, que anunciaría este lunes a las 17 hs, el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas.
Respecto de las bocas de expendio, trascendió que inicialmente serán comercializados en supermercados y en el Mercado Central de Buenos Aires, aunque todavía se negocia el modo de incluir a las carnicerías.
El plan está basado en un convenio con el consorcio de exportadores ABC, que habitualmente vende a los supermercados los cortes que no tienen demanda en el exterior. En ese sentido, ya es el principal proveedor del canal supermercados. El acuerdo también incluye a otras cámaras de la cadena de ganados y carnes como CADIF, FIFRA, UNICA y a los supermercados agrupados en ASU.
El gobierno pretende imitar el modelo uruguayo. El ex presidente de ese país, José “Pepe” Mujica, lo impulsó con el objetivo de vender al exterior los cortes más caros y dejar los más baratos en el mercado interno, con la particularidad de que a ambos lados del Río de la Plata se demandan los cortes para asar, y por ese motivo muchas veces no son en esta región los más económicos.
Ahora, como pidió el presidente Alberto Fernández semanas atrás, en medio de la discusión el cierre de las exportaciones al maíz, el Gobierno pretende “que el asado sea accesible para los argentinos”. De ahí que la mitad de los cortes incluidos en la lista tenga como destino las brasas.