El Gobierno de Japón comenzó la implementación de las medidas para que sus ciudadanos tengan mayor facilidad de acceso a las pruebas de detección del coronavirus.
Por eso, en las calles de las ciudades japonesas se pusieron máquinas expendedoras de pruebas PCR para detección del virus, con el objetivo de aumentar el rastreo en ese país, en el que actualmente se llevan a cabo cerca de 40.000 tests por día, según consignó la agencia Reuters.
Por ejemplo, una clínica ubicada en la capital, Tokio, instaló en total siete máquinas para que las personas eviten ir a los hospitales o centros de atención, así como estar obligados a esperar una cita.
Cada máquina expendedora cuenta con cerca de 60 kits, que tienen un valor de 4.500 yenes, es decir aproximadamente US$ 40.
Igual que pasa con los kits de análisis del ADN en otros países, los clientes tienen que mandar por correo la muestra que contiene su saliva. Se están masificando al punto de llegar a ser más comunes en farmacias o internet.
Esta también es una alternativa para luchar contra una nueva variante de coronavirus encontrada en el país, que, de acuerdo con lo dicho por los expertos en ese país, ha causado alrededor de 100 infecciones en una parte de esa nación.
Todo sucede mientras el gobierno intensifica una vigilancia del virus, teniendo en cuenta la vacunación que ya se está practicando en varios países del mundo.
Esta nueva variante fue hallada en 91 casos en la zona de Kanto, ubicada en el oriente de Japón, donde queda la capital, Tokio. Dos de los casos fueron encontrados en aeropuertos, según lo declarado por el secretario jefe del Gabinete, Katsunobu Kato.
Según el Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas, esta nueva cepa pudo haberse originado en el extranjero, pero es diferente a los otros tipos que se han hallado esporádicamente en Japón. Esta presenta una mutación llamada E484K, justo en la proteína de la espiga del virus, lo que puede socavar la eficacia de las vacunas.
De otro lado, 39 extranjeros y cinco empleados se encuentran detenidos en un centro de inmigración en Tokio, debido a que luego de que les fueran realizadas las pruebas de coronavirus dieran positivo, por lo cual no pueden ingresar al país.
Finalizando el mes de enero del presente año, Estados Unidos detectó el primer caso de una variante del coronavirus que surgió recientemente en Brasil, dijeron las autoridades sanitarias del estado de Minnesota.
Nuevas variantes de coronavirus, más contagiosas que la primera en aparecer en China hace un año, se han convertido en una preocupación para las autoridades de salud en el mundo, que tienen identificadas tres mutaciones, aunque pueden llegar a ser más.