En enero de este año, una familia tipo conformada por dos adultos y dos chicos necesitó en enero $78.624 para evitar caer en la pobreza y $34.334 para superar la línea de indigencia, según informó este miércoles el Indec.
Tras el último incremento, el salario mínimo vital y móvil llegó a $33.00 en febrero. Por lo tanto, se necesitan más de 2,3 salarios mínimos para adquirir una canasta básica familiar y algo más de uno entero para comprar los productos que integran una canasta alimentaria que satisfaga las necesidades de una familia tipo.
El monto por persona de la Canasta Básica Total (CBT), que comprende alimentos y otros bienes y servicios básicos como la vivienda, llegó a $25.445 mensuales en enero. Esa cifra significó un alza de 3,3% con respecto a diciembre y estuvo ligeramente por debajo del 3,9% que marcó la inflación el mes pasado.
El incremento mensual de la CBT se aceleró con respecto al 3% de diciembre y, además, fue el salto más importante desde abril de 2021.
En comparación contra enero de 2021, el costo de la CBT subió 39,3% (unos 11 puntos por debajo de la evolución del nivel general de precios en el mismo período). Así, marcó el sexto mes consecutivo de desaceleración en términos interanuales.
Por su parte, la Canasta Básica Alimentaria (CBA), que solo incluye alimentos y determina la línea de indigencia, ascendió a $11.111 por persona el mes pasado. De esta manera, registró un alza del 4,2% en el primer mes del año. Se trató del mayor aumento desde marzo del año pasado.
El costo de la canasta alimentaria aumentó por encima del nivel general de precios, impulsado por la fuerte inflación del rubro alimentos en enero, que alcanzó 4,9% y registró el mayor salto desde noviembre de 2019.