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Al respecto, Quintela remarcó que “en 30 años de carrera política, jamás me acusaron de corrupto ¿No le parece sugestivo que después de tres años de esta nueva gestión surja una denuncia así? No tengo ninguna causa. La causa a nivel nacional es una imputación a los tres exjefes de Gabinete Capitanich, Abal Medina y Fernández. En ese tiempo, cuando estaba el programa Girsu, más de 150 intendentes del interior del país buscamos ser beneficiarios y nosotros logramos serlo entre fines de 2014 y principios de 2015.

La partida presupuestaria se iba adquiriendo a medida que cada uno iba obteniendo la maquinaria que estaba preestablecida en el convenio. Cada uno iba rindiendo cuentas y luego nos habilitaban a seguir comprando. Estuvieron representantes de la Secretaría de Medio ambiente que verificaron que toda la maquinaria esté. Hoy algunas de esas máquinas están deterioradas o en talleres privados. Aun así nosotros estaremos siempre a disposición de la Justicia”.

Sobre la acusación de que faltan rendir más de un millón y medio de pesos, expresó que “esto es desconocer lo que es la administración pública. Si ese dinero no está rendido en este programa, está en las arcas municipales, pero vienen a decir que no rendí cuentas después de tres años. Si no las hubiésemos rendido, el Tribunal de Cuentas es quien me tiene que exigir que solucione esa situación y nunca lo hizo; pero sí pasó con Felipe Alvarez cuando la Cámara le pidió que rinda cuentas y luego asuma, pero él tomó el micrófono y trató a todos de corruptos”.

Con respecto a la situación del Concejo Deliberante donde todavía no permiten que Alfredo Menem asuma dijo que “es un caso diferente al de Álvarez pues con Menem, el cuerpo deliberativo acudió a la Justicia, quien dice que sí le corresponde asumir, y no contentos con esta respuesta fueron al Tribunal Electoral, quien les dijo lo mismo, y aun así, fueron al Tribunal Superior de Justicia que afirmó que Menem tiene que asumir. Menem siempre se manejó con la Justicia y jamás los insultó”.

Además agregó que “en el caso de Felipe Álvarez, la Comisión de Asuntos Constitucionales, entidad a la cual no pertenezco, determinó que la conducta era inapropiada con los miembros del cuerpo a los que señala de mafiosos”.