17 DIC | 15:06

Gran balance en el cierre de actividades de desarrollo sustentable

La Dirección General de Desarrollo Sustentable Municipal hizo el cierre de sus actividades anuales, el pasado sábado, con una muestra de productos cosechados en un domicilio de un vecino que volcó el aprendizaje en el cultivo de la tierra, y elaboración de alimentos.

En la actividad se hicieron presentes el equipo de Bromatología, quienes acompañaron el proceso de aprendizaje y evaluaron lo aprendido.

La directora, Laura Brizuela manifestó “desde la dirección venimos con un seminario de talleres, de manera conjunta con el programa Pro Huerta del INTA, a cargo de la ingeniera Andrea Carrizo, y a principio de año nos propusimos brindar herramientas al vecino, para que pueda cultivar sus propios alimentos”.

En la oportunidad explicó que el INTA proporciona las semillas a través del programa Pro Huerta, acompañando esta tarea se dieron talleres de distintas temáticas, tales como armado de huertas, huertas urbanas, compost, control de plagas biológicas, entre otras. Es decir, se le brindó a los vecinos todas las herramientas necesarias para que el vecino pueda armar su huerta en casa.

En cuanto a la familia que visitaron sostuvo “ellos son el fiel ejemplo de que se puede hacer. Como cierre hacemos lo que llamamos de la huerta a la mesa, por el que se hacen preparados de alimentos a través de la gente de bromatología, como manipular los alimentos, el cuidado para la salud, así como la nutricionista para conocer los valores”.

Destacando el balance del año indicó “es satisfactorio, trabajamos con varias escuelas, tuvimos varias charlas para incentivarlos y que cambien sus conductas, y desde lo informal se trabajó con los talleres de cactus y reciclables, se instauraron eco puntos, tenemos tres islas en la ciudad, más el punto limpio de San Román, y seguimos trabajando. La idea es seguir trabajando con la gente, acercarnos a los vecinos, trabajar con los Cepares”

El propietario de la huerta sita en barrio Autódromo Norte, Walter Ávila afirmó “comencé haciendo un curso con la gente del INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria), y todas las semillas que me dieron salieron todas. Tenemos cebolla verde, lechuga, acelga, tomate, morrón, zanahoria, perejil, rabanitos, ají, melón, calabaza, choclo, caña de azúcar, papa, batata, sandía, espinaca, perejil, y esto se comenzó en septiembre-octubre. Se consume de manera hogareña, y el placer es único”.

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