La vicegobernadora Florencia López; el secretario general de la Gobernación, Armando Molina; y el intendente de Rosario Vera Peñaloza, Daniel Gallardo participaron de la visita a la obra gestionada por el gobernador Ricardo Quintela ante el Ministerio de Obras Publicas de la Nación y financiada por ENOHSA,0 para realizar el tratamiento de aguas residuales de Chepes, disminuyendo la contaminación que se genera en el lugar de descarga actual.
Luego de la visita a la que calificó de “sorprendente”, el secretario de Agua, Edgardo Karam, indicó que “muchos de los que estuvieron acá pudieron tomar dimensión de esta obra imponente de gran envergadura, una de las más grande que se está haciendo en la provincia desde el aspecto hidráulico por lo que la capacitación de su uso será necesaria”. Además, explicó que “el agua de las cloacas es agua que se perdía y con esto podrá ser aprovechada en la producción”.
“Es decir –explicó Karam- que sumado a lo detallado, “brindará un beneficio sanitario porque el hecho de tratar el agua de cloacas redunda en una mejor calidad en la salud de las personas, evitar enfermedades que produce la contaminación; a parte del gran problema que tienen los habitantes de esta localidad con los desechos cloacales que desde el momento que anegan los pozos negros y las cámaras sépticas, sin dudas esta obra traerá una solución muy esperada como dije en la salud y también en lo económico porque vaciar los pozos y cámaras genera un gasto”.
El secretario precisó que la obra presenta un avance del 60 por ciento, estimando que la primera etapa estaría concluida dentro de seis meses brindando solución a las y los ciudadanos que ya tienen la conexión realizada y que constituyen el 35 por ciento del total de usuarios. Asimismo se mostró esperanzado en que la segunda etapa se pueda gestionar haciendo hincapié en que “es una obra grande que necesita el aporte de fondos del municipio, la provincia y otros organismos”.
La planta que cuenta con una inversión de $134.749.684,73 y beneficiará alrededor de 14 mil habitantes de la zona, se realizará a través de la implantación de una tecnología económica y de fácil mantenimiento, que dotará de un valor añadido a la población, ya que las aguas depuradas podrán utilizarse para regar las plantaciones de la zona, y los fangos, ya mineralizados, como enmienda orgánica para los cultivos.
Es relevante destacar que actualmente la localidad de Chepes no cuenta con un sistema de tratamiento de aguas servidas, sino que estas son vertidas a sistemas individuales de cámaras sépticas y pozos negros, con el consiguiente riesgo de contaminación de las napas freáticas.