03 ENE | 19:38
"Los argumentos de la oposición contra la enmienda no tienen asidero legal"
Durán Sabas recordó que en el año 2007, “el Tribunal Electoral Provincial resuelve en fallo dividido, porque un juez dijo que se habían dado las condiciones de la consulta y los otros dos que no, pero con una interpretación totalmente equivocada, a punto tal que el fallo habla de un 35% del voto positivo, cuando la CP dice todo lo contrario”.
“El Frente Cívico y Social, representado en ese momento por la senadora nacional Inés Brizuela y Doria y Ramón Brizuela y Doria; y la Unión Cívica Radical, representado por Julio Martínez, Aldo Asís y Cristina Zalzwedel, entre otros, recurrieron ese fallo y argumentaron lo correcto, diciendo que la consulta no obtuvo el 35% de votos negativos, que es lo que exige la CP en forma expresa y estaba bien”, puntualizó.
Durán Sabas explicó que “ahora asumen la postura contraria, violando principios de la lógica, como el de contradicción que dice que una cosa no puede ser y no ser al mismo tiempo, o era correcta la postura en aquel momento y lo sigue siendo ahora, o era incorrecta y lo sigue siendo ahora, en tanto y en cuando sea la misma norma”.
“El fallo de aquel entonces quedó firme porque el mecanismo utilizado para recurrirlo fue equivocado procesalmente, cuando se resolvió eso ya estaban vencidos los términos para la vía correcta para recurrirlo”, enfatizó, tras lo que argumentó que “a un fallo pueden llevarlo hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación, y ahí se sabrá quién dice lo correcto, pero el tema que se trata en este momento es de una enmienda constitucional, es un procedimiento reglado por la CP de La Rioja, por lo que no es inconstitucional y es mucho más democrático, porque a la decisión de la Cámara de Diputados de sancionar la enmienda, se la somete a la Consulta del pueblo, que si no está de acuerdo vote por el no –lo que debe superar el 35% del Padrón Electoral- y si no lo hace, esta queda ratificada. Eso es la democracia, la voluntad del pueblo”.
Durán Sabas destacó que “quien respete el sistema representativo, republicano y federal de gobierno, debe aceptar la palabra del pueblo. Cuando el pueblo se expide, la justicia no puede ni debe intervenir, y no hay que temer sus decisiones, sino aceptarlas”.