La Secretaria de Culturas, Patricia Herrera, encabezó la jornada junto a bibliotecarios, bibliotecarias y representantes de bibliotecas populares de la ciudad y el interior provincial.
A 40 años de democracia, este encuentro contó con el objetivo de sociabilizar y pensar las acciones que se vienen realizando en apoyo a las bibliotecas populares como centros culturales en la provincia, y de esta manera, poder brindar capacitación para quiénes están trabajando en esos espacios.
Se lleva a cabo un trabajo mancomunado entre la Secretaría de Culturas y la Federación de Bibliotecas Populares y Municipales de La Rioja (FBPLaR). De esta manera, se promueve la incorporación y regulación de las mismas en la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CONABIP), para que se pueda brindar un apoyo y asesoramiento a todas aquellas instituciones que lo requieran.
En este marco, Patricia Herrera tomó la palabra y realizó la apertura del encuentro señalando que “este séptimo encuentro ya es una transformación dentro de un proceso, porque en el inicio de la gestión planteamos cómo mirar a las bibliotecas, entendiendo que es el primer espacio que conecta a la comunidad con el ámbito cultural en general y con los libros”.
Trayendo a la memoria, recordó que durante la pandemia “tratamos de generar programas de bibliotecas, los cuales fueron los motivos de inicio y de compartir las historias, entendiéndolas como unas herramientas de construcción permanente. Tratamos de promover y solventar el proceso de pandemia y creo que, con mucho convencimiento, aún nos encontramos en un proceso de reactivación”.
Convergencia digital y desafíos
Por consiguiente, destacó que “es muy importante que la federación se pueda consolidar porque es la voz para que las bibliotecas tengan su continuidad de miradas de conocimiento, porque creo que tenemos muchos desafíos por delante, donde la convergencia digital nos proponen esos horizontes. Existe un paradigma nuevo que se les presenta a las bibliotecas y tenemos que seguir tratando de que sean herramientas que fortalezcan el camino”.
Al mismo tiempo, hizo mención a la digitalización manifestando que “el internet y la inteligencia artificial son nuevas líneas de la cultura en general, donde muchas veces vemos cómo atentan a los procesos creativos y nos coloca en el desafío de ver cómo lo resolvemos, por eso, debemos estar preparados como gestores y gestoras, sobre todo. Al comienzo del encuentro hablamos de cómo iban a ser nuestros ejes en nuestra planificación, y comprendimos a los trabajos en comunidad junto al lado laboral vinculado al arte, a la cultura y a los procesos de manera colectiva e inclusiva”.
Asimismo, aseguró que “queremos que todas las voces formen parte de la construcción de la cultura y las bibliotecas, enriqueciéndolas con proyectos. Es importante que estos pasos de diálogo puedan aunar los criterios de trabajo grupal porque cada uno de los lugares cuentan con necesidades esenciales, y necesitamos resolver. Resulta muy sencillo decirlo en otras reuniones a nivel nacional, donde explicamos muchas realidades que ocurren en el interior y que no pasa en Buenos Aires, por ejemplo, porque son realidades distintas”.
Bibliotecas del interior
Gustavo Contreras, presidente de la Biblioteca Marcelino Reyes, por su parte explicó que “cuando se abrieron las convocatorias de proyectos para la Feria del Libro nos pareció una herramienta institucional, es importante para acompañar, sobre todo, a las bibliotecas del interior provincial, porque los que estamos en capital se nos hace mucho más fácil y sabemos qué puerta golpear”.
Finalmente, dejó en claro que como institución “sabemos las realidades que se viven en el interior, y este encuentro otorga la voz a las bibliotecas del interior, e invitamos a varias de ellas para que cuenten un poco la experiencia. La intención es conocer la importancia que tienen las bibliotecas populares en sus distintos territorios, sea un barrio, un pueblo o localidad, porque cumplen un rol muy importante en la sociedad y la cultura”, cerró.