En distintos despachos de la Casa Rosada reina el optimismo, aunque no en exceso, de que en la Cámara de Diputados le darán aprobación al pedido del Gobierno en el que pidió autorización para negociar un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Aunque no figura el monto que se solicitará, ya se dejó trascender que esos fondos frescos servirán para cancelar la deuda que arrastra el Tesoro Nacional con el Banco Central y, más adelante, probablemente el fin del cepo cambiario.
La Comisión bicameral en el Congreso tiene 10 días para tratar la solicitud gubernamental, que luego será girada a Diputados. Creen en Balcarce 50 que la oposición no juntará los votos suficientes que bloqueen la iniciativa. Con que una Cámara apruebe el DNU, la herramienta que eligió el presidente Javier Milei, se podrá avanzar en el entendimiento con el FMI, que ya dio pasos en firme.
Igualmente hay cautela. Lo grafican con una imagen futbolística. “Nunca se gritan los goles antes de que la pelota entre”, afirman. Sostienen que ya no es necesario citar a los legisladores más afines para convencerlos. Pero si bien cuentan esos votos de los sectores dialoguistas que ya en otras oportunidades brindaron su respaldo no tienen asegurada una mayoría. “Hay una gran cantidad de DNU que ni siquiera se trataron nunca”, agregan.
Con el Presidente trabajando desde Olivos y con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, de visita en la exposición agropecuaria que se realiza en San Nicolás, en la Rosada se vio a algunos funcionarios marcharse al Congreso a paso apurado para encarar desde esta mañana las negociaciones con los que todavía no se convencieron de que el nuevo acuerdo con el organismo internacional de crédito será “muy importante porque permitirá sacar al país adelante”, según confió una fuente oficial a este medio.
También hay convencimiento en que el decreto de necesidad y urgencia tiene el mismo peso legal que una ley. “Jurídicamente, si las dos Cámaras lo apoyan, es lo mismo”, aseguran. Y un allegado al Presidente comentó: “Si aprobaron los presupuestos durante las gestiones de Mauricio Macri y de Alberto Fernández, no entiendo cómo podrían oponerse a este acuerdo”.
En el texto de más de 10 páginas que se remitió al Parlamento se consignó que el acuerdo incluye una serie de desembolsos escalonados, que se realizarán en los próximos años con el objetivo de aliviar la carga financiera del país. A diferencia de otros acuerdos previos, este pacto otorgaría a Argentina un alivio considerable en los plazos de pago. Los pagos comenzarán en 2026, con plazos de gracia que permitirán al país la reestructuración de su deuda y el alivio de las tensiones fiscales en el corto plazo.
“Habiendo terminado en el 2024 con el déficit fiscal y cuasi fiscal heredados, este nuevo Acuerdo permitirá solucionar el problema de los stocks (déficits acumulados del pasado), que derivaron en la apropiación de las reservas del Banco Central vía deuda del Tesoro Nacional. Saneado el desequilibrio del flujo y del stock, podremos finalmente terminar de derrotar la inflación y emprender un sendero de crecimiento económico sostenible en el tiempo”, escribió el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, en su cuenta de X con el objetivo de reforzar la posición oficial luego de los cuestionamientos que surgieron desde el kirchnerismo.
Entre quienes negocian para no sufrir sobresaltos en las votaciones figuran Francos, sus vicejefes, Lisandro Catalán y José Rolandi, Eduardo “Lule” Menem -subsecretario de Gestión Institucional- y el titular de Diputados, Martín Menem.
El Gobierno confía en obtener los votos en la Cámara de Diputados para aprobar el DNU del acuerdo con el FMI (EFE)
Algunos sectores del peronismo decidieron este martes presentar una denuncia penal contra el presidente Milei por no enviar el pedido de un nuevo préstamo con el FMI a través de un proyecto de ley para que sea analizado y aprobado por el Congreso.
“En el año 2021, este Congreso sancionó la Ley Fortalecimiento de la Sostenibilidad de la Deuda Pública por una mayoría de 234 votos. El artículo 2 de la mencionada Ley establece que “todo programa de financiamiento u operación de crédito público realizados con el Fondo Monetario Internacional (FMI), así como también cualquier ampliación de los montos de esos programas u operaciones, requerirá de una ley del Honorable Congreso de la Nación que lo apruebe expresamente”, expresaron en un comunicado los representantes legislativos de Unión por la Patria.
“El DNU 179/25 firmado por el Presidente y todo el gabinete de Ministros, no da cuenta de un mínimo de condiciones contenidas en el presunto acuerdo. No especifica el monto, no aclara el destino de los fondos, la tasa de interés, ni prevé una excepción de financiamiento de fuga de capitales”, agrega en otro de sus párrafos.
Mientras tanto, en la Casa Rosada recuerdan que en 2018 el gobierno de Mauricio Macri “tomó un préstamo de 50.000 millones de dólares con el FMI sin pasar por el Congreso”, y que esta vez, aunque sea a través de un decreto, se envió al Congreso.
infobae.com