El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, intentó llevar tranquilidad a los empresarios y directivos de compañías sobre la intervención del Gobierno en la empresa Vicentin. En un encuentro organizado por LIDE —una organización de CEO y líderes empresarios— remarcó que la medida es “excepcional", que desde ningún punto de vista representa una política.
“Pensamos que es una buena señal. Cuando finalice esta etapa de incomodidad que ha generado, con alguna reacción política que entendemos porque son las reglas de luego, creo que vamos a disipar las dudas. Claramente cuando esto se ponga en marcha y funcione como una empresa pública, pero con un management profesional serio. YPF es una marca que da mucha confianza, una empresa que cotiza en la bolsa de Nueva York”, indicó el ministro, casi en el cierre de la presentación.
Cuando finalice esta etapa de incomodidad que ha generado, con alguna reacción política que entendemos porque son las reglas de luego, creo que vamos a disipar las dudas
Además, remarcó que la empresa va a ser un actor muy importante, pero que no va a “copar el mercado”, ya que tienen una participación de entre 10% y 12%. “El mensaje para dar tranquilidad es la excepcionalidad de esto. Es una medida puntual que se eligió frente a la dificultad de resolver este problema por la vía del mercado”, enfatizó en la charla que se desarrolló en forma virtual y donde participaron directivos de Bagó, Maxiconsumo, TGN, Adidas, NEC, Volvo y Camuzzi, entre otras firmas.
“El problema comenzó a comienzos de diciembre del año pasado y en los primeros días que estuve en el ministerio me llegaron repercusiones de cientos de productores que estaban muy angustiados porque no estaban pudiendo cobrar. Esperamos que se diera una solución de mercado razonable, pero no ocurrió. Esta solución es tener una empresa mixta liderada por YPF. Vicentin es una empresa que está en concurso de acreedores del cual no ha podido dar señales positivas”, continuó Kulfas. Y aclaró que se pensaron muchas soluciones antes de tomar la decisión de la intervención y de la presentación del proyecto de expropiación.
El ministro remarcó que la intervención de la compañía Vicentin es excepcional y que no se trata de una política
“Es excepcional. Que nadie crea que tenemos algo que ver con Venezuela —subrayó el ministro—. Pensamos que la Argentina necesita un Estado que tenga una acción sobre el desarrollo económico, que marque pautas, que genere una macroeconomía que busque desarrollo productivo, exportar más y que le dé las condiciones al sector privado. El Estado de manera no dogmática, pragmática, a veces interviene. Este es un caso”.
Kulfas realizó un resumen de todas las medidas de apoyo a las empresas que se tomaron en el marco de la pandemia —como los créditos para el pago de salarios y el programa ATP— pero también se animó a pensar en el día después de la pandemia y en largo plazo. Para eso, presentó los diez consensos para el acuerdo económico y social:
1.- Exportar más.
2.- Todos los sectores productivos son importantes (ninguno sobra).
3.- El mercado interno versus el mercado externo es una falsa antinomia.
4.- No hay futuro sin políticas productivas.
5.- Ninguna política productiva será sustentable si no se piensa en la dimensión ambiental.
6.- Una macroeconomía estable ayuda al desarrollo productivo.
7.- Si no hay una mejora de la productividad, no bajarán la pobreza ni la desigualdad.
8.- Una buena política productiva debe reducir las brechas de género.
9.- La apertura comercial no es un fin en sí mismo, sino una herramienta que debe ser usada de manera inteligente.
10.- Toda política de desarrollo productivo debe ser una política de desarrollo regional.
Consultado sobre qué tipo de reformas —fiscales, monetarias o cambiarias— se piensan implementar para alcanzar estos objetivos, Kulfas prefirió no adelantarlas, pero sí confirmó que están siendo analizadas por el gabinete económico. “En cuanto a la política cambiaria, no es que estemos en absoluto felices de administrar una situación de escasez de divisas, que se da por la situación que fue heredada y por lo que implica reestructurar la deuda con acreedores, y que genera incertidumbre en el mercado de cambio. Las medidas restrictivas no son las ideales y hay que flexibilizar todo lo que sea posible en concordancia con una mayor oferta de dólares”, señaló Kulfas.
Las medidas restrictivas no son las ideales y hay que flexibilizar todo lo que sea posible en concordancia con una mayor oferta de dólares
Según adelantó el ministro, “dentro de poco” el Presidente va a convocar a la mesa del acuerdo económico y social, convocatoria que fue postergada por la emergencia de la pandemia del coronavirus. Con respecto al sector energético, Kulfas también anticipó que en el corto plazo se lanzará un programa de estímulo a la producción de gas —prevén presentarlo en los próximos días— y una postergación del congelamiento de las tarifas de electricidad y de gas para los domicilios particulares. Y que se está trabajando en la Ley de Hidrocarburos.
La Ley de Emergencia y Solidaridad había previsto el congelamiento hasta el 30 de junio. “La pandemia nos agravó la situación y lo extenderemos por algún período no muy largo. La idea es poder estructurar una nueva propuesta tarifaria, una adenda a la RTI vigente, y poder hacerlo dialogando con el sector. Necesitamos comprensión de la situación”, detalló.
infobae.com